

Abel Azcona, más que un artista “revoltoso” o “irreverente”.

Fue cuestión de horas para que se presentara movilización por la Asociación Española de Abogados Cristianos, solicitando el cierre de la exhibición (Que se llevaba a cabo en Pamplona), sustentándose con más de 84.000 firmas a protesta del acto de “profanación eucarística”.
"Abel Azcona comete la mayor ofensa contra la fe católica en España desde la persecución religiosa del siglo pasado", "El Santísimo profanado y secuestrado", esos fueron algunos de los titulares que, posteriormente, Azcona compartiría en su cuenta de twitter y, de los que, daría agradecimiento.
No obstante, esta no es la primera vez en la que el artista se ve involucrado en ambigüedades de este tipo: Cubre un pesado vituperio hacia el Opus Dei (Nombrándole más como “Opus Gay”). Y eso se pudo observar en una de sus “blasfemas” exposiciones titulada: “The Shadow”, en la que aparecían decenas de casos de abusos a menores, de los que, denunciaba al Opus Dei estando detrás.

También, en otra de sus performance llamada “Empathy and Prostitution” (Expuesta en Bogotá, Madrid y Houston), Azcona, se desnudaba y, previamente a un pago simbólico, invitaba al espectador a pasar y recostarse (O llegar hasta donde su pago quisiera ajustar) en una cama junto a él.

Se podría pensar que, tras tantos desafíos hacia su imprudencia, el artista se limitaría, sin embargo, han sido una parte mayormente motivacional; mientras, se sostiene por otro lado, todas las supuestas “revelaciones” por el propio artista al declararse no tan “cuerdo” y, trasladando las justificaciones a su pasado.
Cabe añadir que, el artista español tiene previsto para este 2016, involucrar a México en uno de sus característicos “explícitos” proyectos.
“La religión es una de las mayores epidemias de la historia: Al mismo nivel del cáncer y el sida”.
Y, es así como, Azcona, comenzaba a rondar en boca y crítica de muchos, luego de asistir a 242 eucaristías y haber escrito y presentado en uno de sus performances, titulado: “Amen”, fotografías de la palabra “Pederastia” con hostias consagradas.